Existe gente que piensa que salir a hacer fotos es un simple
paseo, que lo hacemos por que estamos ociosos. Pues para ellos va este pequeño
reportaje ya que no siempre es fácil llegar a los sitios que queremos
fotografiar.
El siguiente caso es un trabajo que hice hace unos años
sobre la llegada del invierno a los Ancares. Nuestra misión era la de llegar al
pueblo de Piornedo al cual no llegaba
ningún coche desde hacía varios días debido a la gran cantidad de nieve caída.
Normalmente tardo 1h y 15´en llegar a este pueblo pero en
esta ocasión tardamos tres horas.
Primer aviso de lo que nos estaba esperando. Esta vez la señal si decía la verdad.
Mis amigos Luis y Pablo comienzan a trabajar apartando los bloques grandes de hielo que podrían dañar el carter del coche. Yo mientras conduzco y hago fotos, ja ja.
El hielo cada vez es mas duro y peligroso y el coche flota sobre él.
Solo puedo bajarme del coche en pequeños tramos donde es muy llano para echar una mano.
Y llegó el desastre, caemos en una zanja sin daños materiales pero que nos costará 35 minutos de nuestro tiempo.
Por fín llegamos a Piornedo y nos encontramos un pueblo parcialmente sepultado por la nieve, es impresionante y hermoso para nosotros, para los lugareños no tanto.
Vista del pueblo sepultado.
Pero despues de tanto esfuerzo las fotos son preciosas y la verdad es que lo pasamos como niños.