Poco
a poco este macho se muestra más confiado a la hora de acercarse a mi hide, la
silueta del mismo no le asusta nada pero cada vez que aprieto el ruidoso obturador
de la Nikon D300 se asusta y se aleja. Estaría genial que Nikon tuviera a bien
cederme una Nikon D4 para mejorar el problema jajaja. Hoy fue el día que más se
me acercó, a unos 15/20 metros. Unos días más y seguro que lo mejoraremos.